El tratamiento para los bloqueos intestinales varía según el tipo de bloqueo y la gravedad: la mayoría de los casos requieren hospitalización, y el tratamiento común incluye líquidos intravenosos (IV), tubos nasogástricos y catéteres. Para casos graves y emergencias, los médicos pueden realizar una cirugía para eliminar las obstrucciones. Los casos menos graves justifican la estabilización, luego la prescripción de cambios en la dieta, como seguir una dieta baja en fibra, que ayuda a restablecer la función intestinal normal y previene futuras ocurrencias.
Los pacientes deben registrarse en un hospital cuando experimentan dolor abdominal o intestinal prolongado para completar una radiografía abdominal o una tomografía computarizada. Estas exploraciones ayudan a determinar las causas y las posibles opciones de tratamiento, señala WebMD. Se pueden usar enemas líquidos o aéreos para forzar el bloqueo a través del intestino. Los tratamientos adicionales para el bloqueo intestinal parcial y completo incluyen cirugía para implantar un stent de malla para abrir el área alrededor del bloqueo.
La obstrucción intestinal se presenta en varios tipos: obstrucción parcial, obstrucción completa y íleo paralítico. Las causas y el tratamiento de estos tipos de obstrucciones intestinales varían, aunque los expertos consideran todas las preocupaciones médicas graves. Al ingresar al hospital, los pacientes reciben estabilización. La estabilización incluye la administración de líquidos por vía intravenosa a través de las venas en el brazo, la inserción de tubos nasogástricos a través de la nariz y el estómago para aliviar la hinchazón y la inserción de un catéter, que se conecta a la vejiga y extrae la orina para su prueba.
Una obstrucción parcial puede resolverse con la estabilización y seguir una dieta baja en fibra, lo que ayuda a que los alimentos y los líquidos pasen fácilmente por el sistema digestivo, según la Clínica Mayo. Las obstrucciones mecánicas completas a menudo requieren cirugía para eliminar la obstrucción y partes de los intestinos dañados. Los cirujanos también pueden insertar endoprótesis para ayudar a facilitar la digestión. El íleo paralítico, una obstrucción temporal, a menudo se resuelve por sí solo después de la estabilización. Los casos persistentes pueden justificar la prescripción de medicamentos que desencadenan contracciones musculares, ayudando a pasar los alimentos a través del tracto digestivo.