Las causas de una frecuencia cardíaca baja incluyen presión arterial alta, tiroides poco activa, complicaciones de cirugía cardíaca, infección de tejidos cardíacos y enfermedades inflamatorias como el lupus, afirma la Clínica Mayo. A veces, una frecuencia cardíaca baja puede ser normal, pero también puede ser un síntoma de un problema con el sistema eléctrico del corazón.
Una frecuencia de pulso baja resulta de la interrupción de los impulsos eléctricos normales que controlan la frecuencia a la que el corazón bombea sangre. La frecuencia del pulso puede disminuir debido al envejecimiento o enfermedades que interrumpen el sistema eléctrico del corazón, como un ataque cardíaco. Un desequilibrio electrolítico, un nivel bajo de tiroides y un medicamento para tratar la hipertensión, como la digoxina y los antiarrítmicos, también causan esta afección, señala WebMD.
Para algunas personas, como los atletas y los adultos jóvenes, una frecuencia cardíaca baja es un signo de estar en buena forma física, explica WebMD. En otros, esta condición significa que el sistema eléctrico del corazón tiene un problema, bombeando una cantidad insuficiente de sangre a las partes del cuerpo. Una baja frecuencia del pulso puede causar un suministro inadecuado de oxígeno al cerebro y otros órganos, lo que lleva a síntomas como confusión, falta de aliento, dolores en el pecho y desmayos. Los pacientes que experimentan estos síntomas deben buscar atención médica, enfatiza la Clínica Mayo.