Los riñones y los pulmones filtran el dióxido de carbono del cuerpo, y los niveles altos normalmente indican ciertas afecciones médicas, ninguna de las cuales se trata con alimentos, según Healthline y WebMD. A menudo, los niveles altos de dióxido de carbono o acidosis, indica una condición de salud pulmonar o metabólica.
El dióxido de carbono, o bicarbonato, un producto de desecho natural del proceso metabólico, es llevado a los pulmones por la sangre donde se exhala, afirman WebMD y Healthline. Cuando el metabolismo o los pulmones no funcionan correctamente, el dióxido de carbono se acumula en la sangre y se vuelve más ácido. La enfermedad renal o hepática causa niveles bajos de dióxido de carbono. Las posibles causas de los altos niveles de dióxido de carbono incluyen el uso excesivo de antiácidos u otros medicamentos, enfermedades del corazón y deshidratación. La enfermedad pulmonar obstructiva crónica, el líquido en los pulmones o la anorexia también pueden resultar en niveles altos de dióxido de carbono.
Tomar bicarbonato de sodio por vía oral o bicarbonato de sodio es apropiado cuando los niveles de dióxido de carbono son demasiado bajos y un médico prescribe el tratamiento, según Healthline. La mayoría de las veces, los médicos deben encontrar la causa de los altos niveles de dióxido de carbono para tratar la condición de manera efectiva. Dependiendo de la causa, los médicos pueden tratar los niveles altos de dióxido de carbono con medicamentos, oxígeno o un dispositivo de presión positiva continua en las vías respiratorias. La recuperación de la acidosis depende de la causa subyacente. Si se sospecha acidosis, se requiere atención médica inmediata.