Algunos signos de que una mascota, como un perro o un gato, están enfermos son letargo, pérdida de apetito, cambios en el estado de ánimo, vómitos, diarrea, aumento de la sed, tos y problemas para orinar, señala WebMD. Algunos otros síntomas a tener en cuenta son bultos, dificultad para caminar o cojear, parches de calvicie, mal aliento y cambios de peso. Algunos síntomas que requieren atención veterinaria inmediata son diarrea extrema, vómitos y dificultad para orinar, afirma la American Humane Association.
Aunque los perros o gatos pueden vomitar o tener diarrea ocasionalmente, es un signo de un problema de salud si estos síntomas ocurren varias veces al día y están acompañados por un comportamiento letárgico y pérdida de apetito. Si el vómito contiene sangre, esto puede ser un signo de una úlcera gástrica o de que la mascota se tragó un objeto, como lo señala WebMD. La diarrea puede ser un indicio de diferentes enfermedades, como infecciones parasitarias.
Un aumento o disminución de la micción y la sed también pueden ser síntomas preocupantes de diferentes enfermedades. Un aumento en la micción o la sed puede ser un signo de diabetes, mientras que una mascota que está orinando menos puede tener un problema urinario.
En los felinos, algunos de los síntomas que pueden indicar un problema de salud son el aliento que huele a amoníaco, pérdida de peso y cambios en el aseo, señala Pet Health Network. La enfermedad renal puede ser la causa de la respiración de amoníaco, y la pérdida de peso puede ser un signo de un problema de tiroides. Los cambios en el aseo o las zonas calvas pueden estar relacionados con una infestación de pulgas. En los perros, las manchas de calvicie o el rascado excesivo también pueden deberse a pulgas o ácaros de la sarna.