Los entusiastas de las aves pueden dejar los comederos de colibríes durante todo el invierno para alimentar a las aves que llegan tarde o las que eligen pasar el invierno en la zona. Es un mito que alimentar a las aves en invierno retrasa su migración. Los colibríes que pasan el invierno en zonas frías necesitan fuentes confiables de néctar.
Evitar que los comederos se congelen es una preocupación importante durante el invierno en climas fríos. Los colibríes necesitan alimentarse lo más temprano posible en la mañana después de salir del sopor, y un alimentador congelado puede tardar horas en descongelarse. Mantenga los comederos protegidos de los vientos y el clima frío, y aíslelos envolviendo el biberón en un plástico de burbujas. Si esas opciones no son posibles, lleve los comederos al interior por la noche y reemplácelos temprano cada mañana.