Algunas metáforas para describir la personalidad podrían incluir referirse a las personas como el tipo de animales que se asemejan a su comportamiento, como un cerdo para personas desordenadas o un dragón para personas enojadas o duras. "burbujeante" generalmente se considera que es entusiasta o divertido.
Las personalidades también pueden ser comparadas con objetos inanimados, lo que es particularmente efectivo para describir a personas sedentarias o sin emociones, como en el caso de una "patata de televisión" o una "roca" respectivamente.
Las palabras "frío" y "distante" a menudo se usan como metáforas para la personalidad, y se entiende que ambas significan que una persona está emocionalmente distante.