"Autopercepción" se refiere a la forma en que las personas llegan a comprender sus propias actitudes y creencias basadas en su comportamiento en situaciones determinadas. Es efectivamente un modelo de uno mismo desde la perspectiva de observador externo.
Por ejemplo, según el teórico de la autopercepción William James en 1884, los comportamientos externos, como fruncir el ceño o sentarse en una silla, se presentan ante el sentimiento interno que se supone que representan. Informan al individuo de sus propias emociones.
Como tal, una de las implicaciones clave de la teoría de la autopercepción es que las actitudes o las emociones pueden alterarse cambiando el comportamiento. Dicho esto, existe cierta variación en la fuerza con que las personas se ven influenciadas por sus propios comportamientos.
