La Rebelión de Shays duró poco más de un año y terminó con la derrota de Shays por parte de la milicia estatal del general Benjamin Lincoln. Aunque fue de corta duración, la Rebelión de Shays desempeñó un papel clave la formación de algunas de las leyes más importantes en los primeros Estados Unidos. Incluso la Constitución fue creada en parte debido a la Rebelión de Shays.
Después de la Guerra de la Independencia de los Estados Unidos, los Estados Unidos sufrieron un aplastante declive económico. Los antiguos socios comerciales internacionales se perdieron, el mercado estadounidense disminuyó y muchos ciudadanos estadounidenses se vieron endeudados. En la década de 1780, los agricultores de Massachusetts, una de las áreas más afectadas, pidieron a los gobiernos estatales que promulgaran leyes pro-deudores para reducir la presión económica. Cuando el gobierno ignoró estos pedidos, muchas granjas fueron confiscadas y los agricultores que no podían pagar sus deudas fueron encarcelados. Estas acciones causaron un creciente descontento en la población local y llevaron a protestas y manifestaciones.
En 1786, las manifestaciones y protestas se convirtieron en un levantamiento armado dirigido por Daniel Shays. Los Shaysites, sin embargo, no estaban bien equipados o entrenados. El gobernador de Massachusetts, James Bowdoin, organizó una milicia dirigida por el general Benjamin Lincoln que aplastó rápidamente la rebelión en el invierno de 1787. Aunque la rebelión de Shays no duró mucho, el descontento entre los agricultores y los ciudadanos continuó. La rebelión conmocionó a los políticos y se usó como justificación para la reforma política que terminó con los Artículos de la Confederación que fueron reemplazados por la Constitución.