El discurso del 7 de marzo fue un discurso de 3.5 horas pronunciado por Daniel Webster que hablaba de la esclavitud como una realidad histórica y no como un problema moral. Se dio el 7 de marzo de 1850 y se considera uno de Los discursos más polémicos del Senado.
El discurso del 7 de marzo de Daniel Webster se pronunció en respuesta a los discursos de Henry Clay y John Calhoun sobre el tema de la esclavitud en los Estados Unidos. Webster argumentó que el problema ya se había resuelto y que la existencia de la esclavitud debía permitirse permanecer en el Sur. Los estados del norte deben proteger los derechos del sur y devolver a los esclavos a sus dueños. También afirmó que la esclavitud no podría existir en territorios de nueva creación basados en la Ordenanza del Noroeste de 1787.