La epidermis inferior contiene células estomáticas que ayudan a prevenir la pérdida de agua y regulan el intercambio de gases como el oxígeno y el dióxido de carbono, lo que permite a las plantas sobrevivir. Otras células en la epidermis inferior incluyen una cutícula cerosa Proteger las capas subyacentes, según Portal de Educación. La transparencia en las células epidérmicas permite que la luz solar pase a través de los cloroplastos, que están involucrados en la fotosíntesis.
El complejo del estoma es una unidad funcional que consta de dos células protectoras que contienen cloroplastos que encierran el estoma real y de dos a cuatro células subsidiarias sin cloroplastos. Las células de guardia desempeñan un papel en ayudar a la planta a conservar el agua. En condiciones húmedas, las células protectoras absorben los iones de potasio del espacio intercelular, creando así un potencial osmótico y causando que el agua fluya hacia las células. Cuando las células de la guardia están hinchadas, los estomas se abren y liberan agua, según el Portal de educación.
La fotosíntesis permite a las plantas fabricar moléculas orgánicas complejas mediante la transformación del dióxido de carbono y la luz solar en moléculas de azúcar y oxígeno. Este proceso forma la base nutricional para la vida en la Tierra, según Scitable. La cutícula cerosa, además de ofrecer protección, absorbe productos de desecho como las resinas y la sal. En plantas como el tomate, la cutícula está pigmentada con carotinoides que le dan un color característico, como lo explica Botany Online.