El etanol es una sustancia que se crea a partir de la fermentación de cultivos alimenticios en fábricas, mientras que el metanol es un químico altamente venenoso producido sintéticamente. Ambas sustancias son variantes del alcohol que pueden usarse como fuentes de energía. pero tienen diferentes métodos de producción y usos prácticos.
El etanol es un líquido incoloro que generalmente se produce a partir del maíz o la caña de azúcar, y es un ingrediente principal en las bebidas alcohólicas. Una vez ingerido, provoca intoxicación y somnolencia. También se usa como una fuente de combustible alternativa: algunos autos están diseñados para funcionar con hasta un 85 por ciento de etanol. Su uso como fuente de combustible se discute acaloradamente, debido a la gran cantidad de maíz que se debe utilizar en su producción en lugar de como fuente de alimento. Además de las bebidas alcohólicas y el combustible alternativo, el etanol se encuentra en una multitud de productos para el hogar, incluidos geles antibacteriales para manos, alcohol para frotar y pintura.
A diferencia del etanol, el metanol es altamente venenoso para los humanos, incluso en pequeñas cantidades. Menos de media cucharadita de metanol puede causar ceguera. El uso principal del metanol es en la formulación de productos químicos como el formaldehído. Es menos inflamable que la gasolina y se puede apagar con agua, lo que lo hace ideal para su uso en autos de carrera y trucos.