Se cree que un gorila llamado Gargantua es el gorila más grande jamás capturado. Pesaba entre 550 y 600 libras, y medía 5 pies y 6 pulgadas de alto.
Según Oborge, Gargantua nació en el Congo belga alrededor de 1929 y fue capturado cuando era joven. Originalmente conocido como "Buddy", su nombre fue cambiado cuando fue vendido a los Ringling Brothers. Tenía una cicatriz que era el remanente de una lesión incurrida cuando un marinero borracho le arrojó ácido nítrico en la cara. El tamaño de Gargantua atrajo a millones de personas al circo, y se le atribuye el hecho de haber salvado el circo sin ayuda de nadie. Después de su muerte en 1949 por neumonía doble, su esqueleto fue donado al Museo Peabody.