Antes de que un tsunami sea inminente, las personas que viven en áreas donde es posible que se produzcan tsunamis deben construir equipos de emergencia para los tsunamis y organizar un plan de comunicación familiar. Cuando se emite una alerta de tsunami, las personas deben sintonizar con el servicio meteorológico de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica, asegurarse de que el kit de emergencia esté bien surtido, localizar a los familiares y prepararse para la evacuación. Cuando se emite una alerta de tsunami, todos deben evacuar a un terreno más alto.
Cuando los tsunamis azotan, a menudo se cortan servicios como electricidad, agua y comunicaciones y no hay suministros disponibles. Los kits de emergencia para tsunamis deben contener suficientes alimentos, agua y suministros para que duren varios días. Dado que las comunicaciones locales se eliminan durante los tsunamis, los miembros de la familia deben llevar tarjetas de contacto con los números de teléfono de familiares externos con los que puedan comunicarse para comunicar que están a salvo.
Una alerta de tsunami significa que un tsunami no puede estar a más de una hora o unas pocas horas de distancia. Si las familias tienen hijos pequeños o miembros discapacitados o ancianos, deben considerar la evacuación temprana. Si hay tiempo, los artículos del hogar pueden protegerse contra las olas. Las mascotas deben mantenerse en el interior para estar listas para evacuar con las personas. El ganado debe ser movido temprano, antes de una advertencia final. Una vez que se emite una advertencia, es imperativo que las personas sigan las instrucciones dadas por las autoridades locales y evacúen de inmediato si se les indica que lo hagan. Nadie debe regresar a casa hasta después de un anuncio oficial de que es seguro.