Las lesiones del manguito de los rotadores pueden reconocerse por la presencia de un dolor repentino acompañado de un dolor o debilidad profundo y sordo en el hombro, según la Clínica Mayo. El dolor puede no estar localizado en El hombro y puede fluir hacia abajo en el brazo, lo que resulta en un rango de movimiento limitado y dificultad para mover el hombro.
La Clínica Mayo describe el manguito rotador como una serie de músculos y tendones en el hombro que rodean la articulación y mantienen la parte superior del brazo dentro del encaje del hombro. Combinados, los músculos y los tendones forman una estructura similar a un puño alrededor de la articulación del hombro. Según WebMD, aunque el hombro tiene un movimiento amplio, no es una articulación muy fuerte. Los impactos o demasiado estrés en la articulación pueden provocar roturas del manguito de los rotadores o hinchazón en los músculos y tendones circundantes. La lesión es muy común entre los atletas que usan su hombro en un movimiento repetitivo. Los jugadores de béisbol, especialmente los lanzadores, nadadores, tenistas y jugadores de fútbol experimentan con frecuencia esta lesión.
El tratamiento varía según la gravedad de la lesión. Según la Clínica de Lesiones Deportivas, la terapia con hielo y frío se usa para controlar la hinchazón y la inflamación. Para casos crónicos, se recomienda alternar frío y calor. En la mayoría de los casos se requiere reposo, y el uso de un cabestrillo puede ser necesario para inmovilizar la articulación para restringir el movimiento. Los medicamentos antiinflamatorios pueden ayudar en el proceso de recuperación y, en algunos casos, se pueden usar inyecciones de esteroides. Para los casos graves que no responden al tratamiento inicial, la cirugía puede ser necesaria para reparar el daño, según la Clínica de Lesiones Deportivas.