La materia formada por un solo tipo de átomo se conoce como un elemento. Los átomos se definen como las partículas más pequeñas de un elemento dado que aún expresan las firmas químicas del elemento.
Los elementos son sustancias que se distinguen por su número atómico y están compuestas por una sustancia atómica pura. Se dividen en varias categorías según sean metales, metaloides o no metales.
Los ejemplos de materia compuesta de un solo tipo de átomo incluyen:
- Diamantes, compuestos de átomos de carbono
- Fósforo, compuesto de átomos de fósforo
- Gas de cloro, compuesto de átomos de cloro
Otras formas de carbono puro incluyen la formación de bola Buckminster Fuller conocida como fullereno, que es una combinación de 60 átomos de carbono. Los elementos como el cloro no tienen forma pura sino gas y no se pueden estabilizar de ninguna otra manera. Los elementos como el argón tienen moléculas hechas exclusivamente de argón y se conocen como monoatómicas.
Una molécula compuesta de un solo tipo de átomo se llama un alótropo. En combinación, pueden formar varios estados diferentes dependiendo de las condiciones externas. El estudio y el uso de elementos en la sociedad humana se remonta a la metalurgia y la llegada del trabajo del metal y el uso del oro en la moneda y la decoración, lo que allanó el camino hacia una era moderna en la que todos los elementos no radiactivos están disponibles en formas relativamente puras para el público en general.