Los árboles más altos de la selva tropical son los árboles kapok, que también se conocen como árboles de ceiba. Un árbol kapok puede alcanzar hasta 200 pies de altura, sobre otros árboles. Esta capa de árboles se conoce como la capa emergente de la selva tropical.
Estos árboles emergentes están expuestos a fuertes vientos y temperaturas extremas. Son adaptables y resistentes, utilizando los fuertes vientos para esparcir sus semillas. El árbol kapok también extiende sus hojas para aprovechar la plena luz solar entre las tormentas de lluvia. Los árboles Kapok pueden crecer hasta 10 pies de diámetro, haciendo de las ramas un hogar ideal para pájaros y ranas.