Según History.com, los peregrinos se hicieron amigos del Wampanoag después de decidir crear un tratado de beneficio mutuo. Su amistad comenzó unos meses después de que los peregrinos desembarcaran en el Nuevo Mundo. Entraron en contacto con el Wampanoag durante los duros meses de invierno que los habían afectado, reduciendo sus números.
Después de su primer encuentro, el jefe de Wampanoag, Massasoit, vino a visitar Plymouth. Según Mayflowerhistory.com, se reunió con los líderes de Plymouth e intercambiaron regalos. Luego todos firmaron un tratado de paz que duraría más de 50 años. Este tratado estableció el comercio, así como la protección mutua entre los dos grupos. Ambas partes acordaron no traer armas a las reuniones de comercio. Si alguno de los peregrinos dañara el Wampanoag, se los enviaría para castigarlos, explica Mayflowerhistory.com. Lo contrario también era cierto: si alguno de los wampanoag hacía daño a un peregrino, lo enviarían a los peregrinos para que lo castigaran. Los peregrinos también acordaron acudir en ayuda de los wampanoag si eran atacados por otros grupos de nativos americanos. En un momento durante su amistad, el líder peregrino y embajador Edward Winslow incluso fue a visitar a un Massasoit muy enfermo y lo cuidó hasta que recuperó la salud.