Hairspray está hecho de moléculas largas llamadas polímeros que se suspenden en un solvente, típicamente alcohol o hidrocarburos, y se envasan en una lata presurizada. Cuando esta solución se pulveriza sobre el cabello, el disolvente se evapora, lo que permite que los polímeros se unan entre sí, formando una superficie dura.
Típicamente, los polímeros en laca para el cabello están suspendidos en solventes de alcohol o hidrocarburos. Estos compuestos son altamente inflamables, pero se piensa que causan menos daño a la capa de ozono que los solventes orgánicos más tradicionales. Algunos tipos de polímeros utilizados son muy similares a los que se encuentran en los tipos de pegamento para madera, aunque otros tipos de polímeros también se usan para aumentar el tiempo que dura la laca para el cabello o para reducir el impacto ambiental de la laca utilizando polímeros de origen natural. p>
Esta solución de polímeros y solventes se empaqueta en una lata de metal sellada. Luego, la lata se bombea llena de un gas volátil, llamado propelente, que empuja hacia abajo la laca líquida y crea un ambiente altamente presurizado. Cuando se presiona la boquilla, la lata se abre al medio ambiente y se alivia la presión dentro de la lata. Esto hace que el gas propulsor empuje hacia arriba el spray para el cabello, rociándolo en el aire a través de una abertura muy pequeña.
El propelente líquido también se puede utilizar en un bote de aerosol. Cuando se dispensa la laca para el cabello y se reduce la presión dentro de la lata, el propelente líquido se convierte en gas y, de manera similar, empuja la laca en el aire.