Para retirar un pendiente atascado, llamado un embrague, lávese las manos con jabón antibacterial y luego frote una pequeña cantidad de vaselina en la parte posterior del pendiente. Una vez que esté lubricado, sostenga firmemente la parte delantera del pendiente en su lugar y gire suavemente el embrague para aflojarlo.
Si el embrague no se afloja girándolo, intente moverlo hacia adelante y hacia atrás con suavidad para realinearlo en el poste. Si es especialmente difícil agarrar el embrague, sostenga el pendiente firmemente e intente agarrar el embrague con fuerza con unas pinzas para sacarlo del poste. Si las perforaciones son nuevas, use un hisopo de algodón para limpiar el área de perforación con una solución estéril como el peróxido de hidrógeno antes de intentar quitar el pendiente.