Las personas se adaptan al medio ambiente de diferentes maneras para hacer frente a las condiciones ambientales y climatológicas cambiantes del planeta. Los humanos se han estado adaptando al entorno cambiante desde los albores de la especie. La adaptación es un factor clave en la evolución humana. Adaptarse al medio ambiente es a veces un cambio natural que refleja las condiciones ambientales, pero otras adaptaciones son el resultado de la innovación de la mente humana.
Los humanos se han adaptado para confiar en su sentido de la visión como todos los otros primates sobre sus otros receptores sensoriales. Esta adaptación es probablemente el resultado de que los homosapiens se conviertan en bípedos y tengan la capacidad de ver más allá de los paisajes. Este es un ejemplo de una adaptación natural. Los seres humanos ahora usan ropa, que fue una adaptación de estilo de vida hecha por humanos anteriores para contrarrestar un ambiente frío o cambios en el clima.
Algunas adaptaciones tienen lugar a lo largo de generaciones de individuos. La adaptación se produce cuando el genoma mutado se difunde en toda la población. Otras adaptaciones tienen lugar bastante rápido. Cuando una persona se muda a una región con una altitud muy alta, su cuerpo debe adaptarse a la menor cantidad de oxígeno en el aire. Al principio, la persona se siente mareada y aturdida, pero finalmente, la persona se aclimata o se adapta a menos oxígeno.
