La mayoría de los intercambiadores de calor están diseñados de tal manera que un fluido, generalmente un gas o líquido, pasa a través de un tubo o separador de metal, mientras que otro fluido circula alrededor de la partición. Esto permite que se produzca el intercambio de calor sin que los dos fluidos se mezclen.
Un intercambiador de calor es un dispositivo mecánico que funciona transfiriendo calor de un material a otro a través del proceso de conducción. Los medios típicamente involucrados en un intercambio de calor son fluidos de temperaturas variables.
Un ejemplo común de un intercambiador de calor es el radiador de un vehículo. Funciona al disipar el calor proveniente del mecanismo de enfriamiento del motor utilizando el aire frío del exterior. El radiador evita que el motor se sobrecaliente.