El resultado de una pelea entre un caimán y un elefante dependería en gran medida de la situación, el entorno y los estándares físicos de cada animal. Habría que realizar una serie de ensayos para determinar el porcentaje de resultados, pero es probable que ningún animal gane todas las veces.
Si bien los elefantes tienen una ventaja de gran tamaño, colmillos increíbles y poder de pisotear, son más torpes y menos expertos en la lucha que los caimanes. Los caimanes son carnívoros y tienen muchos dientes afilados que están hechos para matar. Los elefantes, por otro lado, solo tienen armas defensivas porque comen plantas y no carne.