Algunas de las consecuencias de una sobredosis de analgésicos incluyen dificultad para respirar, dormir por horas prolongadas, adicción, caer en coma y la muerte. Los analgésicos son algunas de las drogas más comúnmente abusadas, según lo informado el Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas de los Institutos Nacionales de la Salud.
Cuando una persona ha tomado una sobredosis de un analgésico, es probable que tenga ciertos signos y síntomas, uno de los más comunes es la náusea. El individuo tendrá pupilas dilatadas del ojo y también puede experimentar estreñimiento. Es altamente recomendable que las personas tomen la cantidad adecuada de analgésicos según lo prescrito por un médico calificado para evitar complicaciones.
Es probable que una persona que haya tomado demasiado analgésico tenga dificultad para respirar y que pueda perder el aliento fácilmente. Es probable que el individuo se sienta débil y se quede dormido por más tiempo de lo habitual. En los casos graves, una persona que ha tomado demasiados analgésicos puede caer en coma o morir.
El uso continuo de analgésicos puede crear una condición llamada adicción, lo que significa que la persona comenzará a depender de la droga para sentirse bien. La mejor manera de tratar la adicción es a través de la rehabilitación. Es una buena idea ponerse en contacto con un profesional médico cuando experimente cualquier caso de sobredosis o abuso de analgésicos.