La presencia de un sabor similar a la sangre o metálico en la boca después del ejercicio puede atribuirse a un estrés extremo en los capilares pulmonares que forman la barrera de gases en el pulmón, según la Biblioteca Nacional de Medicina de EE. Instituto Nacional de Salud.
Cuando estos capilares están estresados hasta el punto de romper la barrera de colágeno, un atleta puede experimentar sangrado en el pulmón. Esta condición, llamada hemorragia pulmonar inducida por el ejercicio, suele ocurrir en atletas de élite que hacen ejercicio a su máxima capacidad, según el Instituto Nacional de la Salud o NIH. La condición generalmente no causa daño permanente; y puede remediarse reduciendo el nivel de esfuerzo.
Las causas adicionales de un sabor sangriento después del ejercicio incluyen una higiene bucal deficiente, anafilaxis inducida por el ejercicio o altas dosis de medicamentos o suplementos, según Live Well at Jillian Michaels. Si la culpa es de una mala higiene oral, es probable que el sabor esté presente en otros momentos. Sin embargo, como el ejercicio puede causar sequedad en la boca, el sabor puede hacerse más evidente, de acuerdo con Live Well at Jillian Michaels.
La anafilaxia inducida por el ejercicio es una condición más grave en la que el cuerpo sufre una reacción alérgica al ejercicio. Aunque es poco frecuente, esta afección puede progresar a síntomas más serios, como urticaria, hinchazón y pérdida de conciencia, afirma Live Well en Jillian Michaels. En este caso, es vital buscar ayuda médica inmediata.