La textura no homogénea del útero se refiere a la aparición de masas focales que dan una superficie heterogénea no uniforme de la pared exterior del útero, según el Centro Nacional de Información Biotecnológica. Las dos causas más comunes de útero no homogéneo son los fibroides uterinos y adenomiosis.
Los fibromas uterinos son tumores benignos de tejido muscular o fibroso que se desarrollan en la pared uterina endometrial externa, afirma el NCBI. La adenomiosis es una afección no cancerosa por la cual el revestimiento interno de la glándula del útero crece hasta la pared muscular externa. A menudo, la adenomiosis imita los síntomas de los fibromas. El útero no homogéneo es muy común y afecta al 50 a 70 por ciento de las mujeres a la edad de 50 años. Los fibromas leves a moderados y la adenomiosis generalmente no afectan la capacidad de la mujer para tener un hijo, y la mayoría de las mujeres con estas afecciones no tienen síntomas.
Las mujeres que presentan síntomas pueden experimentar un flujo menstrual anormalmente intenso, dolor pélvico, aborto espontáneo, disfunción de la vejiga, cólicos, infertilidad y complicaciones durante el embarazo, informa NCBI. Los fibromas típicamente aumentan de tamaño durante el embarazo y disminuyen después de la menopausia. La solución para los casos sintomáticos de moderados a severos es una histerectomía, un procedimiento en el cual se extrae el útero. Las mujeres con mayor riesgo de tener útero no homogéneo son mujeres africanas decentes, mujeres que experimentan menarquia temprana y mujeres obesas. Las pruebas de ultrasonido indican la presencia de fibromas y adenomiosis; sin embargo, la resonancia magnética es la prueba de imagen preferida para caracterizar y encontrar la ubicación exacta de los fibromas.