Los países con una economía mixta incluyen Islandia, Suecia, Francia, el Reino Unido, Estados Unidos, Rusia y China. Estos países tienen una combinación de gasto gubernamental y sistemas de libre mercado basados en Participación del gasto público como porcentaje del producto interno bruto. Algunos gobiernos gastan mucho más dinero en proporción al PIB, mientras que otros gastan mucho menos.
El gasto gubernamental de Islandia es el 57 por ciento del PIB del país. Eso significa que el otro 43 por ciento es la industria privada. El gasto gubernamental de Suecia es el 52 por ciento de su PIB. El Reino Unido cuenta con 47.3 por ciento de fondos del gobierno, y los Estados Unidos son 38.9 por ciento. La mayoría de los países cuentan con economías mixtas, lo que facilita el comercio y la realización de negocios a escala global.
Los programas de gobierno en las economías mixtas varían. El bienestar, las pensiones, la defensa, la Seguridad Social y la atención médica son algunas áreas en las que los gobiernos gastan grandes sumas para apoyar a sus poblaciones. En general, los países con economías más desarrolladas tienen un mayor gasto gubernamental como porcentaje del PIB.
Las ventajas de una economía mixta incluyen industrias privadas más eficientes, menor regulación gubernamental, mejor estabilización cuando fallan los principios del libre mercado, mayor igualdad para prevenir la pobreza absoluta y programas gubernamentales para promover la estabilización. Las desventajas de una economía mixta son demasiada regulación que ahoga la libre empresa, demasiado endeudamiento del gobierno durante las crisis y asignación ineficiente de recursos.