Los músculos que se unen al proceso coracoideo son el pectoral menor, el coracobraquial y el bíceps braquial. El proceso coracoideo es parte del omóplato o escápula. Recibe su nombre por su parecido con el pico de un cuervo.
El coracobraquial es un músculo pequeño que se encuentra justo debajo de los bíceps y en la parte superior del proceso coracoideo. Permite el movimiento del brazo, especialmente el codo. Debido a que este músculo se usa con tanta frecuencia, está sujeto a lesiones y uso excesivo.
El cuerpo tiene dos músculos pectorales, que se encuentran en el pecho. El pectoral menor es el más pequeño de los dos. Es un músculo plano que se encuentra justo debajo de los músculos pectorales más grandes. Se ramifica desde la tercera, cuarta y quinta costillas para unirse al proceso coracoideo. Permite que la escápula se incline hacia arriba y gire hacia abajo.
El bíceps braquial tiene una cabeza larga y corta. Es la cabeza corta que se adhiere al proceso coracoideo. Este músculo ayuda a flexionar el brazo en el hombro y en el codo. También ayuda al supinate antebrazo. Esto es cuando el radio es paralelo al cúbito mientras que la palma de la mano está hacia arriba o hacia afuera.