Las posibles causas de un bulto en el oído incluyen infecciones, irritación, traumatismo y tumores, según Healthgrades. Los nódulos en los oídos pueden ser blandos o duros, y suelen aparecer en el lóbulo de la oreja, el canal auditivo y detrás de la oreja.
Los bultos en los oídos pueden ser únicos, múltiples, sin dolor o adoloridos, declara Healthgrades. Pueden aumentar rápidamente de tamaño o permanecer igual. Las infecciones locales a menudo causan el crecimiento de bultos en las orejas en forma de forúnculos o abscesos. Varios tipos de infecciones causan el agrandamiento de los ganglios linfáticos cerca de los oídos. Estas glándulas inflamadas pueden sentirse como pequeños bultos en la piel. Las causas traumáticas comunes de los bultos en las orejas incluyen picaduras de insectos y lesiones graves que conducen a la acumulación de sangre en los tejidos.
Algunos bultos en los oídos son tumores benignos o malignos de la piel, los órganos o los tejidos blandos, señala Healthgrades. Estos tipos de bultos requieren una biopsia o cirugía para identificar la presencia de cáncer. Algunos bultos son quistes que son innatos o causados por inflamación, un tumor o daño gradual.
Los bultos en los oídos que se producen debido a una infección, trauma o inflamación a menudo desaparecen cuando se trata la causa del problema, explica Healthgrades. Es esencial contactar a un médico inmediatamente si una persona tiene bultos persistentes que crecen continuamente durante un período prolongado o si se produce un bulto en el oído después de una lesión en la cabeza, ya que estos casos pueden indicar una condición grave.