El Archaeopteryx era una especie carnívora, principalmente comía ranas, lagartijas, libélulas, escarabajos, ácaros y otros insectos. Utilizaba su pico afilado, dientes y plumas para ayudar a capturar a su presa.
El Archaeopteryx usó su pico largo y afilado y sus dientes para atrapar insectos y pequeños animales en el suelo y en los árboles. También era común que el Archaeopteryx comiera ácaros e insectos que se encuentran en su cuerpo, sacándolos de su piel o atrapándolos en las plumas de sus alas.
Aunque el Archaeopteryx tenía dedos de segundo plano hipermóviles o garras asesinas, los científicos no creen que las garras se usaran para cazar o matar presas. Su dieta de insectos y pequeños animales sugiere que estas garras eran un remanente evolutivo en lugar de una herramienta útil.
El Archaeopteryx era aproximadamente del tamaño de un cuervo, alcanzando hasta 20 pulgadas de longitud corporal y pesaba de 1.8 a 2.2 libras. Tenía una cola inusualmente larga en comparación con la longitud de su cuerpo.
Aunque este dinosaurio parecido a un ave tenía plumas de vuelo asimétricas bien desarrolladas, no volaba largas distancias. En cambio, usó sus alas para planear o volar distancias cortas. Al igual que el pavo real, probablemente pasó la mayor parte de su tiempo en el suelo en lugar de en los árboles, volando solo para escapar de los depredadores.