La dieta Waterfall permite a los suscriptores comer frutas y verduras frescas, guisantes secos, frijoles comestibles, lentejas, garbanzos, arroz integral, nueces, semillas, productos de soya, tofu, pollo y pescado. Se evitan el café, los cereales a base de trigo, los productos lácteos, la pasta, los alimentos procesados y azucarados, el chocolate, la mayonesa, las carnes rojas y los alimentos que contienen harina.
El propósito de la dieta en cascada es fomentar la liberación del exceso de líquido en tres fases. La fase uno dura dos meses e implica la identificación de posibles alérgenos alimentarios. Esta cantidad de tiempo permite que el cuerpo se limpie de elementos que pueden estar causando retención de líquidos.
Durante la primera semana de la segunda fase, se agregan pastas de trigo sin huevo, galletas de trigo o harina de trigo para saber si se presentan síntomas, como fatiga, congestión sinusal, dolor de cabeza o aumento drástico de peso. Repita el proceso durante la segunda semana con la adición de productos lácteos. Agregue los huevos durante la tercera semana y el extracto de levadura durante la cuarta semana, luego conjeture la presencia o ausencia de síntomas si la alergia alimentaria es un problema.
El objetivo de la fase tres es evitar que la acumulación de agua regrese. Continúe comiendo el 90 por ciento de los alimentos permitidos en la fase uno. Complete el 10 por ciento restante incorporando alimentos variados que no incluyen ningún productor de alergia comprobado.