Si hay irritación, enrojecimiento e inflamación del revestimiento cervical, puede ser causado por una infección o una lesión. También puede haber otros síntomas como sangrado vaginal, dolor pélvico, fiebre y secreción de pus. La condición se conoce como cervicitis, según WebMD.
El cuello uterino es la abertura que se encuentra entre la vagina y el útero. La cervicitis se produce cuando hay una inflamación y enrojecimiento del revestimiento cervical debido a factores, como algún trauma, una infección causada por una enfermedad de transmisión sexual, una reacción alérgica a algún irritante y un crecimiento excesivo de bacterias que producen vaginosis bacteriana, afirma WebMD.
Los médicos pueden diagnosticar la afección mediante un examen pélvico en el que se puede obtener una muestra de cualquier secreción con un hisopo y luego examinarse en un laboratorio. Si la cervicitis es causada por una enfermedad de transmisión sexual, se pueden prescribir antibióticos o medicamentos antimicóticos, dependiendo de qué patógeno esté causando la infección, señala la Clínica Mayo. Del mismo modo, las parejas sexuales deben ser tratados en tales casos.
Es importante para las mujeres consultar a un médico y recibir tratamiento si experimentan alguno de los síntomas asociados con la cervicitis. Si una infección de transmisión sexual no se trata, puede extenderse a otros órganos como el útero y las trompas de Falopio. Esto puede causar una complicación como la enfermedad inflamatoria pélvica. También puede conducir a problemas de fertilidad.