Una de las causas más comunes de un bulto en la cabeza es un traumatismo en el sitio del bulto, que hace que los tejidos se hinchen y se lastimen potencialmente uno o dos días después de la lesión, explica Healthline. Las protuberancias en la cabeza también pueden ocurrir en forma de lesiones benignas, como quistes o masas vasculares, o debido a masas cancerosas, señala el Departamento de Otorrinolaringología de la Universidad de Columbia.
Incluso un traumatismo leve en la cabeza puede provocar una lesión cerebral, por lo que siempre se debe buscar atención médica si existe alguna duda sobre si una lesión en la cabeza es lo suficientemente grave como para justificar una visita al médico o al hospital, según BrainLine.org. Los signos de una conmoción cerebral después de un traumatismo craneal incluyen pérdida de conciencia, dolor de cabeza, vómitos, pérdida de memoria, convulsiones y confusión. En niños menores de 2 años, los padres deben tomar cualquier hinchazón o cambios de comportamiento como indicadores de una posible conmoción cerebral y buscar atención médica inmediata para el niño. Un estado similar al sueño o una falta total de respuesta es un signo de una emergencia médica más grave, llamada coma.
Un médico puede realizar una biopsia de un bulto en la cabeza no relacionado con una lesión para determinar si es canceroso, afirma el Departamento de Otorrinolaringología de la Universidad de Columbia. Otras pruebas de diagnóstico útiles para diagnosticar masas de la cabeza incluyen exploraciones de MRI, tomografías computarizadas y evaluaciones neurológicas.