La sudoración excesiva en la cabeza puede ser hereditaria, un efecto secundario de un medicamento, desencadenado por un tipo particular de clima o causado por otra condición, según Healthline. Las opciones de tratamiento para la sudoración excesiva localizada incluyen Botox, iontoforesis, antitranspirantes fuertes y remedios caseros.
Botox se usa solo en casos extremos y afecta el funcionamiento de los nervios que hacen que las glándulas sudoríparas produzcan sudor, señala Healthline. La iontoforesis se basa en tratar el área afectada con una corriente eléctrica débil para inhibir la producción de sudor. Los antitranspirantes recetados se utilizan para tratar los casos leves. Los remedios caseros incluyen el uso de antitranspirantes de venta libre y el baño una vez al día o más para eliminar las bacterias.
Los pacientes que sufren de sudoración excesiva en cualquier parte del cuerpo pueden estar sufriendo de hiperhidrosis focal primaria o de hiperhidrosis generalizada secundaria, explica Healthline. Los pacientes que sufren las primeras suelen comenzar a desarrollar síntomas en la infancia y, además de la cabeza y la cara, experimentan sudoración en las manos, los pies y las axilas. Aquellos que padecen este último desarrollan sudoración excesiva como efecto secundario de un medicamento u otra afección médica.
En pacientes con hiperhidrosis generalizada secundaria, la sudoración excesiva puede ocurrir en todo el cuerpo o en un área en particular y también puede aparecer durante el sueño. Las afecciones que pueden causar hiperhidrosis generalizada secundaria incluyen cáncer, lesión de la médula espinal, enfermedad pulmonar, enfermedad cardíaca y enfermedad de Parkinson.