Según MedicineNet, el sangrado vaginal se produce después de que un pequeño cepillo utilizado durante una prueba de Papanicolaou rasque el frágil revestimiento del cuello uterino. El rasguño y el sangrado posterior no son motivo de preocupación. Este tipo de sangrado no requiere intervención para detenerlo. Si el sangrado proviene de la prueba de Papanicolaou, es leve y se manifiesta como manchas pequeñas, la mayoría del tiempo.
Según la Sociedad Canadiense de Cáncer, el sangrado normal después de la prueba de Papanicolaou se produce durante uno o dos días. Sin embargo, si el sangrado después de la prueba de Papanicolaou es intenso o persiste, el paciente debe consultar a un médico, recomienda Cancer.net.
Medicine.net aconseja que las pruebas de Papanicolaou que están manchadas con sangre se analicen en un laboratorio de patología. El análisis de muestras con sangre ayuda a revelar si hubo demasiado sangrado, lo que podría dificultar el diagnóstico definitivo según los resultados de la prueba de Papanicolaou. Según la Sociedad Canadiense de Cáncer, se tardan entre dos y ocho semanas en aparecer los resultados de laboratorio.
Si el informe de un patólogo implica un sangrado excesivo, un médico puede recomendar que un paciente reprograme una prueba de Papanicolaou, como indica Medicine.net. Sin embargo, muchos profesionales no dirigen otra prueba de Papanicolaou si un paciente se encuentra en los últimos días de la menstruación, cuando menos se espera sangrado. Por lo tanto, es la cantidad y no la mera presencia de sangre en una prueba de Papanicolaou lo que puede plantear una preocupación médica.