Una protuberancia o quiste blanco en el interior del labio es un quiste de moco, también llamado mucocoele, según Skinsight. Puede formarse en cualquier parte, pero generalmente se encuentra en el labio inferior.
Una protuberancia blanca o un quiste mucoso se forma en el labio cuando las glándulas salivales se bloquean. Esto es causado por cualquier trauma en la cavidad oral debido a mordeduras de mejillas o labios, malos hábitos dentales o perforaciones, afirma Healthline. Los síntomas asociados con estos quistes dependen de la frecuencia con la que se forman y de la profundidad a la que el quiste ha penetrado en la piel. Los quistes mucosos que son superficiales o cerca de la superficie de la piel aparecen como una hinchazón elevada que tiene un tinte azulado y es suave al tacto. Los quistes más profundos son blancos, se sienten como un nódulo o un bulto y están sensibles al tacto.
Los quistes generalmente son indoloros y temporales, pero los quistes recurrentes pueden volverse permanentes si no se tratan, según Healthline. Si no hay antecedentes de trauma y el quiste no se cura durante más de dos meses o si mide más de 2 centímetros, se necesita una biopsia para descartar un lipoma o cáncer. Los quistes pequeños no requieren tratamiento y generalmente desaparecen por sí solos. Los quistes con frecuencia recurrentes se pueden tratar con terapia con láser, crioterapia o inyecciones de corticosteroides. Un quiste excesivamente grave se puede extirpar quirúrgicamente, junto con toda la glándula salival. Dependiendo de la gravedad, los quistes de moco oral pueden tardar de una semana a dos años en curarse por completo.
