Las células procariotas y las células eucariotas tienen múltiples características en común, incluido el uso de ADN para codificar proteínas, ARN para la traducción en proteínas y ribosomas para leer el ARN. Ambos tipos también comparten esa célula básica Características como las membranas y moléculas celulares, como las proteínas, los lípidos y los carbohidratos. Muchos procariotas y eucariotas también tienen paredes celulares, pero los componentes de las paredes difieren entre sí.
Ni los procariotas ni los eucariotas violan ninguna de las características básicas requeridas para la vida tal como la conoce la humanidad, y en verdad tienen mucho más en común entre ellos que diferencias. Cada uno debe metabolizar las fuentes de energía y generar ATP. Cada uno utiliza sensores químicos para reaccionar a su entorno. Cada uno depende de un rango relativamente estrecho de condiciones ambientales para mantener la homeostasis y prosperar. Ambos son parte de los ecosistemas donde se comportan como productores o como consumidores.
Sin embargo, tanto como los dos tipos de células tienen en común, hay algunos aspectos que son únicos para cada uno. Los eucariotas tienen orgánulos unidos a la membrana como una característica definitiva, de la que carecen los procariotas. Muchos productores de procariotas utilizan la fotosíntesis como productores de eucariotas, pero algunos son quimioautótrofos. Estos utilizan compuestos inorgánicos provenientes de respiraderos térmicos en los fondos marinos y otros lugares para producir energía en lugar de luz solar.