Según la Clínica Mayo, poner peróxido de hidrógeno en los oídos es un tratamiento efectivo para suavizar la cera del oído. Sin embargo, la Clínica Mayo advierte que el peróxido de hidrógeno no debe usarse si el oído tiene un tubo o un agujero.
Según la Clínica Mayo, a veces se necesita peróxido de hidrógeno cuando se acumula demasiada cera en el oído y bloquea el canal auditivo. La Clínica Mayo recomienda el uso de unas gotas de peróxido de hidrógeno, aceite de bebé, aceite mineral o glicerina dos veces al día durante cuatro a cinco días. Además, la oreja debe irrigarse con agua para eliminar la cera suavizada, según la Clínica Mayo. El Dr. Sears recomienda enjuagar la cera de los oídos con una solución que sea mitad agua y mitad peróxido de hidrógeno.