En griego clásico, la palabra salamandra se traduce como animal de fuego, y se refiere a la supuesta inmunidad para el fuego del mítico anfibio. En un entorno culinario, el término salamandra indica un pollo de engorde culinario con una temperatura extremadamente alta Elementos calefactores y que funcionan con electricidad o gas.
El vínculo entre las salamandras y los incendios puede deberse a las antiguas creencias mitológicas de que las salamandras sintieron la necesidad de apagar incendios y que, de ser necesario, se encontrarían con incendios para apagarlos. Las lagartijas pequeñas viven principalmente en el agua, aunque también pueden vivir en tierra. Los que viven en la tierra habitan en áreas húmedas, ya que morirán si su piel se seca. Las salamandras a menudo duermen o hibernan en troncos húmedos, y salen corriendo de debajo de los troncos cuando los troncos se recogen y encienden en llamas.