Los perros Basset tienden a oler mal porque la suciedad, el sebo, la saliva y los restos de comida quedan atrapados en sus pliegues faciales, de acuerdo con el Club Basset Hound del sur de California. Estos perros tienen labios grandes, grandes papadas y orejas largas y caídas que frecuentemente tocan el suelo y recogen pequeñas cantidades de suciedad, heces y otras sustancias potencialmente olorosas. El lavado regular es la forma más efectiva de combatir estos olores.
Los perros Basset tienen una piel suave y arrugada que se pliega en pliegues en todo el cuerpo, especialmente en la cara, el cuello y las articulaciones. El Club Basset Hound del sur de California explica que la piel requiere grandes cantidades de sebo, la lubricación grasa producida por las glándulas sebáceas de los perros. En pequeñas cantidades, el sebo es claro e inodoro. Sin embargo, cuando queda atrapado en los pliegues de la piel de los perros, el sebo desarrolla un olor acre. Los baños disuelven el aceite y eliminan su hedor.
Los baños regulares también reducen la probabilidad de quistes sebáceos, que se forman cuando las glándulas de sebo se obstruyen con el pelo, la suciedad y el sebo viejo. Los quistes no son peligrosos ni dolorosos, pero su contenido tiene un olor concentrado y pútrido. El olor de un quiste sebáceo roto, del tamaño de un níquel, puede llenar rápidamente una gran sala.
Otra fuente potencial de olor desagradable del perro de fondo es la impactación de la glándula anal, según Topsfield Bassets. Todos los perros tienen dos glándulas junto a su ano que producen pequeñas cantidades de un compuesto fétido utilizado para marcar el territorio e identificar a otros perros. Las glándulas anales sanas y sin obstrucciones se vacían durante cada movimiento intestinal, pero las glándulas impactadas son apestosas y dolorosas para el perro.