Los gansos se paran en una pierna para ayudar a regular la temperatura de sus cuerpos. Esta postura se usa para intentar ayudar a los gansos a conservar la mayor cantidad de calor corporal posible.
Como otras aves, un ganso no tiene plumas calientes que cubren sus patas. Esta falta de aislamiento en las extremidades inferiores provoca una disminución de la temperatura corporal. Un ganso que levanta un pie permite que la pata levantada esté más cerca del calor del cuerpo central del ave y las plumas calientes, lo que hace que la temperatura del cuerpo aumente nuevamente. Esta postura con una sola pierna se gira entre las piernas, por lo que cada apéndice tiene la oportunidad de mantenerse caliente.