Por lo general, cuando un dragón barbudo comienza a ponerse amarillo, es una señal de que el reptil no se siente bien. Si un dragón barbudo experimenta algún cambio anormal en su piel, debe ser visto inmediatamente un veterinario.
La enfermedad de la piel amarilla es causada por un hongo agresivo que invade las capas superiores e internas de la piel. Puede causar decoloración, lesiones e incluso úlceras debajo de las capas de la piel. En casos severos, el hongo puede alcanzar los órganos internos y causar hinchazón e inflamación. En algunos casos, las patas traseras de un dragón se vuelven de color amarillo pálido como un signo de una enfermedad que debe ser revisada.
Esta enfermedad se propaga fácilmente entre otros reptiles, y el tratamiento debe comenzar de inmediato cualquier síntoma.