La prueba de ANA, o prueba de anticuerpos antinucleares, se usa como prueba primaria para ayudar a evaluar a una persona para detectar trastornos autoinmunes sistémicos, según Lab Tests Online. La prueba se usa más comúnmente para diagnosticar el lupus eritematoso sistémico.
Esta prueba generalmente se solicita cuando un paciente muestra síntomas estándar de trastornos autoinmunes sistémicos, o trastornos que afectan a muchos órganos y tejidos en el cuerpo, afirma Lab Tests Online. Dependiendo de la persona, esta prueba se puede usar sola o junto con otras pruebas de autoanticuerpos.
Durante la prueba, los técnicos de laboratorio buscan el grupo ANA de autoanticuerpos producidos por el sistema inmunológico, explica Lab Tests Online. Estos autoanticuerpos apuntan a sustancias que se encuentran en el núcleo de las células del cuerpo y, en última instancia, causan daños severos en los tejidos y órganos.
La prueba ANA también se usa junto con una historia personal detallada para diagnosticar o descartar otros trastornos autoinmunes, como el síndrome de Sjogren, la escleroderma y la polimiositis, según Lab Tests Online. En algunos casos raros, la prueba de ANA se usa para las personas con síndrome de Raynaud, artritis o dermatomiositis.
Hay dos tipos diferentes de pruebas de ANA, señala Lab Tests Online: inmunoensayo y anticuerpo fluorescente indirecto. Para el inmunoensayo, los resultados se informan como un número. Para el anticuerpo fluorescente indirecto, los resultados se informan como proporciones, lo que indica la cantidad de ANA en la sangre incluso después de que se diluyó.
