Según la NOAA, la respuesta es que, técnicamente, los rayos son un fenómeno bidireccional. La parte visible a simple vista va desde el suelo hasta el cielo, pero solo después de que un camino de electricidad cargada negativamente descienda desde las nubes.
Las partículas con carga negativa bajan de las nubes en una serie de explosiones, y las partículas con carga positiva suben hasta la parte superior de los objetos altos, atraídos por la energía negativa anterior. Cuando las dos cargas se encuentran, se desarrolla un canal a través del cual viaja un rayo. El proceso ocurre en aproximadamente una millonésima de segundo, demasiado rápido para que el ojo humano vea la formación de la huelga.