Los monos capuchinos no suelen ser buenas mascotas. A pesar de su naturaleza social y alta inteligencia, los monos capuchinos presentan muchos problemas únicos para los dueños de mascotas. Uno de estos obstáculos es la falta de un hábitat natural para un tipo de mono que prefiere columpiarse de los árboles.
Estos monos, nativos de América Central y del Sur, son capaces de transmitir enfermedades a sus dueños, como la hepatitis. Los animales pequeños, que crecen hasta alrededor de 4 libras, también contraen enfermedades de los humanos. Muchos monos capuchinos se vuelven diabéticos debido a la dieta adaptada que consumen. Deben usar pañales para fines sanitarios, y el gasto es significativo, dada la vida útil del animal de hasta 40 años. Los monos muerden de vez en cuando, y los resultados a veces son serios.