Ciertos monitores de glucosa en sangre permiten que los pacientes obtengan muestras de sangre de sitios que no sean la punta de los dedos, como el antebrazo, la parte superior del brazo, el muslo y la base del pulgar, afirma WebMD. La monitorización continua de la glucosa, que consiste en implantar un pequeño sensor debajo de la piel, es otra alternativa a las pruebas de glucosa con los dedos.
Los sensores utilizados en los sistemas de monitoreo continuo de glucosa generalmente permanecen en el lugar durante una semana, afirma el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales. Estos sensores monitorean los niveles de glucosa en el fluido tisular y envían los resultados a un monitor inalámbrico. Aunque es una opción más costosa, el monitoreo continuo de la glucosa en la sangre a menudo permite a los pacientes un mejor control de la glucosa en la sangre.