Los poros obstruidos, llamados comedones, son causados por una acumulación de secreciones y suciedad en la abertura del poro. La glándula sebácea se encuentra justo debajo de la superficie de la piel y secreta un aceite llamado sebo a través los poros El sebo se combina con las células muertas de la piel dentro del folículo piloso y pasa a través de los poros para salir del cuerpo. Cuando este proceso ocurre correctamente, la piel permanece hidratada y saludable.
Los poros obstruidos comienzan a formarse a medida que el sebo y la suciedad se acumulan dentro de sus aberturas. Hay dos formas de comedones: una cabeza negra y una cabeza blanca. Un whitehead, o comedón cerrado, se desarrolla cuando el poro ya no tiene una abertura y el aceite continúa acumulándose debajo de su superficie. Estos comedones pueden romperse o infectarse.
Un comedón abierto tiene una amplia abertura en la superficie, lo que brinda al sebo y la acumulación de suciedad la oportunidad de oxidarse por la exposición al aire. La oxidación hace que la melanina dentro del sebo se convierta en una capa de color marrón oscuro o negro, de ahí el término "espinilla negra". Una espinilla puede convertirse en un grano. Los poros obstruidos pueden aparecer en cualquier tipo de piel, pero se encuentran con mayor frecuencia en personas con piel grasa. Las espinillas y los puntos negros también son formas de lesiones del acné y se pueden tratar de varias maneras.