En individuos sanos, los niveles de hemoglobina por encima de 7 gramos por decilitro siguen siendo lo suficientemente seguros como para renunciar a la transfusión, siempre que haya un volumen de sangre normal, según Samir M Fakhry en un artículo de Critical Care En general, resulta adecuado para pacientes en estado crítico y aquellos con enfermedad cardiovascular.
Anteriormente, los profesionales médicos creían que un nivel de hemoglobina de 10 gramos por decilitro era lo suficientemente bajo como para compensar los peligros asociados con las transfusiones de sangre, informa Sanjeev Sharma, MD y colaboradores en American Family Physician. Sin embargo, estudios recientes han mostrado tasas de mortalidad más bajas al evitar la transfusión, dado que el individuo mantiene un nivel de hemoglobina de 7 gramos por decilitro. Con la presencia de diferentes condiciones cardíacas o de la sangre, aumenta el peligro de alcanzar este nivel bajo de hemoglobina.