Por lo general, es seguro que una persona con un resfriado haga ejercicio, según WebMD. Es importante prestar atención a las señales del cuerpo para evitar trabajar demasiado y causar más daño que beneficio.
Algunas medicinas para el resfriado, como los descongestionantes, pueden aumentar la frecuencia cardíaca, según WebMD. La combinación de ejercicio y medicamentos puede sobrecargar el corazón, lo que provoca dificultad para respirar y dificultad para respirar. Si una persona tiene asma y un resfriado, es mejor hablar con un médico antes de hacer ejercicio, ya que el ejercicio puede provocar un aumento de los síntomas respiratorios. Si una persona tiene fiebre, el ejercicio puede estresar al cuerpo aún más, haciendo que la persona se sienta peor y aumentando el tiempo de recuperación.