Los huevos de paloma tardan 18 días en incubarse. Durante este período, ambos padres se turnan para incubar los huevos. El macho se sienta en ellos cada mañana hasta la tarde, y la hembra pasa la tarde, el período de la noche a la mañana y la madrugada en ellos.
Una vez que nacen, los dos pichones alimentan a los pajaritos con un líquido lechoso especial. Esta sustancia no es la verdadera leche producida por las glándulas mamarias, sino un líquido nutritivo creado en los cultivos de las aves o en las cavidades de la garganta. Después de una semana, los sistemas de las aves jóvenes son lo suficientemente fuertes como para digerir semillas y frutas, y se alimentan de ambos alimentos durante el resto del mes que pasan en el nido.