Debe haber al menos dos átomos de cloro en una molécula de cloro. Esto produce lo que se llama una molécula diatómica. El gas hidrógeno también aparece como una molécula diatómica.
El cloro es un gas amarillo verdoso a temperatura ambiente y tiene un número atómico de 17, lo que significa que hay 17 protones en el núcleo. Es un elemento altamente reactivo y es tóxico si se ingiere o inhala, y el gas de cloro se usó como arma durante la Primera Guerra Mundial.
El cloro también puede ser muy beneficioso cuando se usan pequeñas cantidades o cuando se combina con otros elementos. El hipoclorito de sodio, o lejía, es un excelente desinfectante, y el cloruro de sodio, o sal, es necesario para la vida.